Porque somos sepultados juntamente con él para muerte por el bautismo, a fin de que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en vida nueva.
Dios quiere que andemos en una total vida nueva. Es posible decir que se ha nacido de nuevo y seguir viviendo una vida vieja.
Para tener una vida nueva al grado de la que Dios manda necesitamos cambiar de mente, dicho de otra manera o en otras palabras: Necesitamos cambiar de pensamientos. Renovar los pensamientos recurrentes, gastados y cansados que tenemos en el coco.
El apóstol Pablo, nos dice en Efesios 4:22-23: En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos,
y renovaos en el espíritu de vuestra mente,
El cambio de mente o pensamiento está muy ligado al arrepentimiento, es un requisito de Dios.
No os conforméis a este siglo,
sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta. Romanos 12:2
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