Nacer de nuevo
Muerto estaba yo, triste y abandonado
Muerto estaba yo, en delitos y pecados
El desenfreno en mi vida me tenía controlado
Y rumbo al desfiladero me hundía en el fango
El mundo y sus placeres mi corazón habían dañado
Aprisionado con grilletes de inmundicia y de pecado
Me importaba poca cosa, lo que pasaba a mi lado
Pues este mundo y sus placeres me tenían controlado
Muerto estaba yo, triste y abandonado
Muerto estaba yo, en delitos y pecados
Lágrimas, luto y dolor eran mi pan cotidiano
Deprimido y sin consuelo
Caminaba sin descanso
Hasta que un día mí Señor al verme necesitado
Tuvo piedad de mi y me ofreció su mano
Ahora digo con fe: Mi Señor me ha salvado
Ya esclavo más no soy del delito y del pecado
Porque
Ya no tengo más recuerdos que revivan mi pasado
Porque con su Gracia, mi vida entera el Señor la ha transformado
Mi vida cual derroche de lujuria y menoscabo
Se hundía más y más en el fango del pecado
Pero hoy canto con fe: El Señor me ha libertado
Hoy soy libre de las tinieblas, del juicio y del pecado
Que lo sepa todo el mundo: El Señor me ha libertado
me ha dado nueva vida. Ha borrado mi pecado
libre soy, libre soy, Gloria a Dios
me ha libertado
Muerto estaba yo, triste y abandonado
Muerto estaba yo, en delitos y pecados
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