jueves, 16 de diciembre de 2010

Por el camino de la gratitud

El ser humano es malagradecido por naturaleza. Con todas las bendiciones que recibimos constantemente de parte de Dios debiéramos estar continuamente delante de nuestro hacedor con la misma actitud del salmista en el salmo100.
Cantad alegres a Dios, habitantes de toda la tierra.
100:2 Servid a Jehová con alegría;
Venid ante su presencia con regocijo.
100:3 Reconoced que Jehová es Dios;
El nos hizo, y no nosotros a nosotros mismos;
Pueblo suyo somos, y ovejas de su prado.
100:4 Entrad por sus puertas con acción de gracias,
Por sus atrios con alabanza;
Alabadle, bendecid su nombre.
100:5 Porque Jehová es bueno; para siempre es su misericordia,
Y su verdad por todas las generaciones.

 
Contrario a lo que dice este salmo, ¿cúanta ingratitud se observa en esta sociedad materialista que nos ha tocado vivir?
Pero en medio del descuido y la negligencia alguien tiene que levantar una voz de agradecimiento que salga de lo más profundo de nuestro ser..
Por eso y mucho más:
Gracias Señor por tus misericordias...
Gracias Señor por tu inmenso amor con el cual nos ama cada día
Gracias Señor por tus cuidados y atenciones
Gracias Señor por sanar todas nuestras dolencias...
Gracias Señor por darnos a entender tu Palabra. Gracias Señor por perdonar nuestras maldades.
Gracias Señor por darnos el pan de cada Día y el agua para calmar la sed...
Gracias Señor por enviar el Salvador de los pecadores...
Gracias Señor por rescatar del hoyo nuestra vida. Gracias Señor por tus bondades


Sencillamente y de lo más profundo de nuestro ser: Gracias Señor por todos los beneficios que nos da diariamente..según el salmo 103....Amén por siempre.

Bendice alma mía aJehová y bendiga todo mi ser su santo nombre...

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