Señor: Mi suplica va a favor de los que sufren, para que tú los alientes y les dé la mejor de las medicinas: La Paz en sus mentes...Consuélalos tú Señor, porque tú conoces las necesidades humanas mejor que nadie.
Mi oración va a favor de los que lloran y sufren por el hambre que pasan, para que tú les des alimento de alguna manera y mitigue su hambre de justicia...y los saques del pozo de la desesperación y la desesperanza...
Mi petición va a favor de los que no tienen ninguna esperanza en el día de mañana. Por aquellos que lo perdieron todo, hasta las ganas de vivir.
Mi plegaria va a favor de los que tienen rotos sus corazones, y prefieren dormir y dormir, para no enfrentarse con su triste realidad.
Mi oración va para que todos aquellos que por tu nombre son menospreciados y padecen asedio por defender su fe, la que tú les ha dado. Fortalécelos en todo tiempo...
Mete tu poderosas manos y ayúdalos al clarear la mañana...Dale la verdadera libertad: La espiritual...
Oye, Señor; oh Señor, perdona; presta oído, Señor, y hazlo; no tardes, por amor de ti mismo, Dios mío; porque tu nombre es invocado sobre tu ciudad y sobre tu pueblo. Daniel 9:19
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